Entender a nuestros compañeros animales, saber qué les pasa por la cabeza o cómo se sienten, ha sido una aspiración que nos acompaña desde hace tiempo. Más allá de los intentos caseros o los sistemas que adiestran a los perros para pulsar botones que emiten palabras, una noticia pinta un escenario un poco distinto. El gigante tecnológico chino Baidu ha presentado una solicitud ante la Administración Nacional de Propiedad Intelectual de China que dibuja un sistema IA diseñado para descifrar la comunicación animal, lo que harías que pudieras entender a tu gato o perro.
Según reportó Sky News, esta propuesta tecnológica reuniría diferentes tipos de información proveniente de los animales. Hablamos de sus vocalizaciones, sus gestos o actitudes y también datos fisiológicos. Toda esta amalgama de información sería procesada y combinada mediante inteligencia artificial con el propósito de analizarla y lograr así interpretar cualquier sonido que emita una mascota.
La idea, según detalla Baidu en la solicitud, sería mejorar «la precisión y eficiencia de la comunicación entre especies«. No obstante, un portavoz de la empresa ha puesto los pies en el suelo, advirtiendo que esta tecnología todavía se encuentra en una etapa de investigación.
Decodificando señales animales
Dicho esto, no te hagas ilusiones con tener conversaciones con tu perro sobre la serie que viste anoche o con que tu gato se ponga a despotricar sobre tu gusto musical… La solicitud no hace ninguna mención a la creación de una IA que sea capaz de responderle a los animales y que ellos lo entiendan. Lo más probable, por lo que se describe, es que la principal información que se obtenga se centre en el estado emocional de la mascota, en cómo se siente en un momento dado. Así que, por ahora, la cosa va más de entender su sentir que de mantener una conversación. Pero por ahí se empieza.
También existen otras investigaciones de renombre que persiguen traducir con exactitud los ruidos que hacen los animales, sobre todo los caninos. Por poner un ejemplo, un estudio que sigue su curso en el Laboratorio de Cognición Comparativa de la Universidad de California en San Diego, ha estado analizando cómo se pueden emplear las cajas de sonido, esas de los botones, para ayudar a los perros a expresarse. Algunos canes han llegado a mostrar que pueden combinar un par de palabras para formar peticiones sencillas como «jugar fuera» o «comer ahora».
Pero, como en todo, hay críticas argumentando que se asume demasiado sobre la capacidad real de los perros para comprender por completo las palabras. Podrían simplemente estar pulsando los botones porque han aprendido a hacerlo al relacionarlo con ciertas señales, como el propio sonido que emite el botón. Con la inteligencia artificial pisando el acelerador de esta forma, esperemos que Baidu dé en el clavo.