¿Qué hacer con tu viejo televisor inteligente?

A inicios de este año, compartimos una «Guía para la compra de televisores inteligentes«. Y nos consta que muchos usuarios pudieron aprovecharla para renovar los suyos. Pues bien, si acabas de comprar un nuevo Smart TV, probablemente te preguntarás qué hacer con tu viejo televisor inteligente. ¡Te damos algunas ideas!

Al final, que un televisor inteligente no tenga las últimas tecnologías que le exigimos no significa que ya no valga. Diversas son las situaciones en las que podemos darle alguna utilización interesante, y sólo es cuestión de saber cómo sacarles partido. Casi, siempre, todo lo que le hace falta es un dispositivo de transmisión para «actualizarlo».

Los dongles, como el Google Chromecast, son buenos aliados de los televisores inteligentes algo viejitos.

Usa tu antiguo Smart TV como monitor principal o secundario

Una de las utilizaciones más atractivas que vemos para cualquier televisor inteligente que vaya a ser reemplazado, es como monitor principal o secundario. Puedes ampliar la pantalla de tus portátiles a través de un HDMI, o directamente enviar contenidos del móvil a tu TV para verlos más cómodamente. ¡Imagina editar las fotos en una pantalla grande!

Nuestra recomendación es que coloques el televisor inteligente en algún punto de la casa donde no moleste. Asegurándote de ello, siempre será una buena alternativa por la cual optar para ganar unas pulgadas.

¿También cambiaste el móvil? ¡Felicitaciones! Puedes usar tu viejo Android como un Chromecast con una aplicación.

Entrégalo como parte de pago, para ahorrar

Son varios los fabricantes que te posibilitan entregar tu viejo televisor inteligente -cuanto menos viejo mejor, claro- como parte de pago del nuevo televisor inteligente. Si aún estás preguntándote si LED TV, QLED y OLED, podrías aprovechar esa indecisión para averiguar sobre las modalidades de compra en las que entregas tu antiguo aparato.

Incluso algunos gigantes minoristas como Walmart o Amazon están dispuestos a recibir tu viejo televisor inteligente si cuentas con uno que esté en buen estado. Los programas de intercambio son ideales para ahorrar dinero, y solemos aconsejarlos porque reducen la contaminación ambiental. Otra ventaja es que puedes seguir con la misma marca.

Te sugerimos, finalmente, que compares cuánto te pagan por tu viejo televisor inteligente cada una de las cadenas que anuncian los programas de intercambios. A veces, una llega a pagarte 100 o 200 euros más que la otra 😮.

Véndelo a un familiar o amigo o, por qué no, donarlo

No todos necesitan un televisor compatible con las últimas consolas ni listo para reproducir contenidos en 8K. Probablemente habrá alguien en tu círculo que estará más que satisfecho de hacerse con un televisor inteligente sabiendo que te ha pertenecido y que lo has cuidado. Si con eso tu conocido se ahorra dinero, y tú te quedas tranquilo de que dejas el televisor en buenas manos, puede ser una situación que los beneficie a ambos.

Donarlo tampoco es una mala idea, en absoluto. Si ya has sacado provecho todo lo que podías de ese Smart TV, quizás podría terminar sus días siendo el centro de atención de un espacio al que concurran niños o ancianos. Absolutamente todos estarán pendientes de su pantalla, y mejorarás la calidad de vida de mucha gente.

Crea un centro de entretenimiento para tu hijo

Si hasta ahora consideras inadecuado o irresponsable colocar un televisor inteligente en el cuarto de tu hijo, o hijos, pero piensas que ha llegado el momento de hacerlo, puedes hacer que tengan su primera experiencia con el viejo Smart TV familiar. Eso tiene variadas ventajas, como que ya está configurado o que ya sabes sus secretos.

Luego, hay algunos accesorios de TV esenciales con los que podrías multiplicar su entretenimiento.

El último recurso: recicla tu viejo Smart TV

Si crees que no tiene caso, porque tu viejo televisor inteligente ya no funciona como debería hacerlo y no puedes venderlo, ni tampoco donarlo, entonces deberías reciclarlo. Son muchos los lugares de desechos electrónicos específicos donde lo recibirán con gusto, y además se encargarán de quitar cada una de sus piezas.

El reciclaje de los aparatos tecnológicos que ya no vamos a utilizar es la clave para una eliminación responsable. Puede que no tengas tiempo de desarmarlo tú mismo y evaluar cuáles de sus componentes de hardware aún tienen cierta vida por delante, pero no hay excusa para sacarlo a la calle y dejar que cualquiera se lo lleve. Ese pequeño esfuerzo de llevarlo a un sitio de desechos electrónicos ayuda enormemente a reducir el impacto ambiental.