Cada día se consume más contenido en formato corto, desde los Shorts de YouTube hasta los clips de TikTok o Reels de Instagram. Lo que antes era un vídeo de media hora, ahora debe comprimirse en unos segundos bien estructurados que atrapen la atención al instante. Sin embargo, condensar y recortar vídeos largos en un pequeño clip no siempre es una tarea sencilla, ya que hay que seleccionar las partes adecuadas, encuadrar a la persona que habla y mantener una narrativa coherente, lo que se traduce en muchos más tiempo del que pensamos.
Aquí es donde entra en juego AI Video Cut, un editor online gratuito que usa inteligencia artificial para convertir vídeos largos en clips breves sin tener que pelearse con un programa complicado. Además, en gran parte el proceso es automático, aunque ofrece suficientes opciones para pulir los resultados según lo que necesite cada creador de contenido. Sobre todo es útil para quienes producen vídeos cortos para YouTube, TikTok o Reels, pero también para webinars, entrevistas, podcasts grabados o incluso directos, y desean reciclar su material.
Qué ofrece AI Video Cut para la edición de vídeos cortos
Lo primero es la posibilidad de aprovechar indicaciones predefinidas, ya que no siempre sabemos por dónde empezar cuando queremos extraer lo más atractivo de un vídeo. Tienen plantillas que sirven para crear avances, anuncios, clips virales por tema o fragmentos de testimonios. Y si ninguna encaja con lo que se busca, se puede redactar un texto para guiar a la inteligencia artificial sobre qué escenas deben mantenerse y cuáles conviene recortar.
Otro punto fuerte es la transcripción automática, que ayuda a revisar lo que se ha dicho y permite editar el texto para pulir subtítulos y retirar muletillas o pausas innecesarias. La herramienta añade subtítulos con distintos estilos visuales, algo imprescindible hoy en día, ya que buena parte de los usuarios ve los vídeos sin activar el sonido.
En cuanto a la calidad técnica, la detección de rostros garantiza que los protagonistas permanezcan siempre en el centro de la imagen, evitando que se pierda al hablante. Además, se puede seleccionar el formato final entre varias proporciones, desde el vertical 9:16 pensado para móviles hasta el cuadrado 1:1. Eso o mantener la resolución original.
También ofrece personalización de la duración con clips ajustados a 7, 15 o 25 frases, ayudando a adaptar el contenido a la atención del público en cada red social. Y para quienes gestionan marcas, se puede añadir un logo sobre el vídeo para reforzar la identidad visual. Incluso es posible acceder a los clips directamente desde un bot en Telegram, lo que hace que el flujo de trabajo sea más ligero.
Recortar un vídeo largo en un clip corto con AI Video Cut
El uso es bastante directo y no requiere instalación. Lo primero es entrar en la web oficial de AI Video Cut e iniciar sesión con una cuenta de Google o Facebook.
Una vez que te identifiques, te aparecerá un mensaje con lo que ofrece la versión gratuita. Puedes ver sus planes de pago o ir directamente a la versión gratuita haciendo clic al botón Get Started.
Ahora ya nos muestra todas las opciones para empezar a recortar el vídeo largo. Aquí tenemos que o bien cargar un vídeo desde el ordenador o el móvil, o bien pegar directamente un enlace de YouTube. La versión gratuita permite procesar grabaciones de hasta 50 minutos de duración.
Aquí tienes dos posibilidades:
Template (Plantilla), que incluye opciones preconfiguradas para crear clips de estilo promocional, virales o temáticos sin nada de complicaciones.
También puede indicar cuántos fragmentos quieres obtener de un mismo vídeo (por ejemplo, 7, 8, 9 o 10 clips). Y si los cortes deben tener 7, 15 o 25 frases, adaptándose a diferentes necesidades de publicación.
Es posible elegir entre varios aspect ratios para que el resultado se adapte a cada red social. El vertical 9:16 está pensado para TikTok o Shorts de YouTube, el cuadrado 1:1 encaja mejor en Instagram o LinkedIn, y también puedes optar por 16:9 o el tamaño original si lo prefieres.
Por último, la aplicación detecta automáticamente el idioma hablado, aunque se puede cambiar manualmente para mayor precisión. Además, ofrece subtítulos automáticos que puedes activar o desactivar según tu interés. Estos se muestran en distintos estilos visuales, tal como aparece en las capturas.
Mientras que Custom (Personalizado), además de las opciones anteriormente mencionadas, también permite redactar un texto en el que indicas cómo quieres que la IA recorte el vídeo. Por ejemplo, “extraer 10 frases motivacionales sin repetir”.
Una vez terminada la configuración, solo tienes que pulsar en Submit y esperar unos minutos a que la IA prepare los clips. El resultado se puede descargar en la calidad establecida y, si lo deseas, con tu logo.
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