Google ha ampliado su iniciativa para que agentes de IA puedan efectuar pagos, incorporando compatibilidad con criptomonedas, monedas estables y rieles de pago convencionales. La compañía trabajó junto a Coinbase y la Fundación Ethereum para incluir la moneda estable Rails, y coordinó esfuerzos con más de 60 organizaciones, entre ellas Salesforce, American Express, Visa y Paypal.
Según la publicación oficial, el objetivo es que las aplicaciones de IA también puedan transferir valor de forma segura y verificable, obedeciendo la intención del usuario en cada operación.
En abril, Google presentó un protocolo para normalizar la comunicación entre agentes IA. La nueva actualización extiende ese marco a las operaciones económicas, buscando interoperabilidad entre pagos basados en tarjetas y transferencias con monedas estables.
Pagos programables y registros auditable
Los defensores de las monedas estables sostienen que su adopción va más allá del trading y puede facilitar transacciones certificadas entre sistemas automatizados. La Fundación Ethereum, que anunció la formación de un equipo de IA descentralizada -llamado «dAI», busca posicionar la segunda cadena más usada como cimiento para aplicaciones de IA que dependan de registros distribuidos, mientras Coinbase aporta su experiencia en infraestructura de pagos con criptoactivos.
Datos de DeFiLlama muestran que la masa monetaria en monedas estables ha crecido desde unos 205 000 millones de dólares a comienzos de año hasta cerca de 289 000 millones en circulación recientemente.
Con agentes de IA actuando como compradores, gestores o intermediarios, la posibilidad de pagos estandarizados abre nuevas utilidades para estos activos, por ejemplo liquidaciones programables entre instituciones.
Google también ha seguido otras puertas de entrada al sector financiero mediante su oferta Google Cloud Universal Ledger, orientada a crear liquidaciones programables con criterios de grado institucional.
En el plano institucional, la suma de esfuerzos entre grandes empresas tecnológicas, emisores de monedas estables y organizaciones del sector financiero apunta a que este tipo de integraciones seguirán ganando terreno en proyectos piloto y casos empresariales.