La Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA) ha emitido un aviso que exige a los intercambios y empresas de criptomonedas en la Unión Europea tomar medidas inmediatas para adecuarse a las normativas MiCA en relación con las monedas estables. La fecha límite para que los proveedores de servicios de criptoactivos (CASP) se alineen con estos requisitos ha sido establecida para el 31 de enero de 2025.
El aviso aclara que las monedas estables, denominadas oficialmente tokens referenciados a activos (ART) y tokens de dinero electrónico (EMT), deberán cumplir estrictamente las normas del reglamento MiCA. La ESMA ha solicitado que los CASP implementen sistemas para evaluar el grado de conformidad de estas criptomonedas y restringir la circulación de aquellas que no cumplan.
Relacionado: Crypto.com es el primer intercambio en obtener licencia MiCA
Coordinación entre autoridades y obligaciones de los CASP
La ESMA también ha instado a las Autoridades Nacionales Competentes (ANC) a colaborar en la supervisión de estas medidas, pretendiendo una aplicación uniforme en toda Europa. Al mismo tiempo, ha recalcado la importancia de que los proveedores de servicios comuniquen de manera efectiva a sus inversores sobre los cambios que realicen. Las campañas de información deberán explicar claramente las restricciones que se aplicarán a las monedas estables no conformes, sobre todo en lo relacionado con posibles peores condiciones de ejecución para los usuarios.
Un ejemplo de estos avisos es el email que envió el intercambio Coinbase a finales de noviembre, en el que comunicó a sus usuarios europeos que el 14 de diciembre de 2024 se restringirían opciones de inversión y almacenamiento de monedas estables que no cumpliesen con MiCA, como es el caso de USDT.
Para l@s aún no enterad@s, la regulación MiCA, aprobada en 2022, entró plenamente en vigor el 30 de diciembre de 2024. Este reglamento proporciona una base jurídica uniforme para el sector de las criptomonedas en la UE, incluyendo pautas específicas para las monedas estables. Estas monedas, diseñadas para mantener paridad con activos de reserva como monedas fiduciarias, son vistas como instrumentos útiles para pagos transfronterizos rápidos, aunque con dependencia de activos subyacentes.