Denon presenta el AVC-X2850H, un receptor AV pensado para convertir el salón en una sala con sonido tridimensional y vídeo de alta resolución. El nuevo modelo reúne siete canales más dos de subwoofer, 150 vatios nominales por canal y compatibilidad con los formatos Dolby Atmos y DTS:X. Además, incluye soporte para señales de vídeo en 8K y conexión inalámbrica HEOS.
Denon AVC-X2850H, un centro para cine y música

Con diseño orientado a quien quiere sonido de cine pero sin complicaciones, el AVC-X2850H promete un rendimiento uniforme para películas, series y juegos. La entrega de 150 W por canal ayuda a mantener claridad y dinámica cuando la mezcla de sonido exige presencia y detalle.
Al mismo tiempo, al admitir formatos envolventes Dolby Atmos y DTS:X, el receptor sitúa efectos en distintos puntos del espacio, de modo que las bandas sonoras y los efectos se perciban con mayor precisión desde el sofá.
Y para quien hoy tiene contenidos en 4K y quiere estar listo para 8K, el dispositivo incorpora tres entradas HDMI con capacidad 8K y otras conexiones que permiten alimentar televisores y consolas de última generación sin hacer malabares con adaptadores.
Conectividad y ajuste inteligente
Seis entradas HDMI en total y salidas con eARC para enviar audio de alta resolución al televisor y otros equipos. Incluye Wi-Fi y Bluetooth, que facilita el emparejamiento con teléfonos y tablets, y el sistema HEOS permite distribuir canciones por altavoces compatibles en distintas habitaciones.
Denon también integra un proceso de calibración automática, Audyssey MultEQ XT, que ajusta la respuesta del conjunto en función de la acústica del lugar. Además, Channel Level Monitoring ofrece una visualización en pantalla de las salidas de cada altavoz para quien quiera afinar volúmenes y balance con más control.
Preparado para jugar y gestionar contenidos
Este receptor AV incluye soporte para VRR (tasa de refresco variable), QFT y ALLM, funciones pensadas para minimizar retrasos y estabilizar la imagen cuando se usan consolas o PCs potentes. No es un aparato exclusivo para cine; su cometido es servir tanto a quien ve películas en alta definición como a quien exige respuesta rápida en juegos interactivos.
La reproducción de música también recibe trato preferente. Es compatible con tocadiscos y posibilidad de escuchar con auriculares inalámbricos conectados al equipo.
Diseño práctico y precio
En cuanto al control, la interfaz no obliga a ser un experto; la combinación de menús en pantalla y ajustes automáticos permite ponerlo en marcha con relativa facilidad.
El apartado físico tiene un frontal elegante, controles accesibles y una disposición interna que prioriza la refrigeración y la potencia.
El modelo queda situado en una franja de mercado donde la relación entre prestaciones y coste pesa mucho. Su precio oficial es de 989 euros.